En febrero de 2010, el Ayuntamiento de Colima a través de su Instituto de Planeación, decidió intervenir el Parque Huertas del Cura Arzac, ubicado en el corazón de la ciudad conurbada Colima- Villa de Álvarez, entre las colonias San Francisco Sur y Fátima, para generar un proyecto urbano-arquitectónico a través de un proceso que fortaleciera la participación de los vecinos y fomentara la apropiación y el compromiso de la comunidad con el espacio. Sin embargo en este primer ejercicio la falta de coordinación entre los actores debilitó el resultado obstaculizando el sentido de apropiación de los habitantes y provocando el deterioro de dicho espacio. La razones específicas de su abandono fueron identificadas a través de una evaluación en la que se demandó el rescate del sitio.
Partiendo de esta razón, en alianza con la Academia a través de la colaboración de estudiantes, en el 2017 se retoman las acciones para rehabilitar el espacio. El primer paso fue elaborar el Manual de Estrategias Anticipativas para la Apropiación y el Mantenimiento del Parque (MAES), en el que se identifican los valores intangibles y se establecen los compromisos que la comunidad y el gobierno están dispuestos a asumir para que este funcione de manera óptima.
Como primera acción en la búsqueda de la transformación del espacio físico, en el 2018 se realizó una propuesta de intervención del contexto inmediato o área de influencia, considerando los principios del manual.
Este año 2019, como última etapa de planeación comunitaria se concibió la propuesta de diseño para la rehabilitación del Parque a través del desarrollo de tres talleres de participación ciudadana:
El primero para conocer los problemas, intereses y las propuestas especificas del espacio percibidas por los vecinos.
El segundo taller denominado “Noche de huertas” se dieron a conocer dos proyectos, basados en la visión comunitaria formulada previamente; la exposición fue posible a través de láminas de presentación, maquetas tiflológicas (utilizadas para que las personas con discapacidad visual puedan comprender en su totalidad lo que la maqueta representa solo con el tacto) y recorridos virtuales narrados. Al evento acudieron más de 80 vecinas y vecinos de todas las edades, interesados en la recuperación de su parque, que tras informarse de las propuestas votaron por la de su preferencia. La decisión final fue posible a través de una dinámica lúdica de inversión comunitaria, donde cada vecino votó con dinero ficticio (IPCOINS) su propuesta favorita, siendo seleccionada aquella con mayor recaudación.
La siguiente etapa consistirá en la presentación oficial a los vecinos del MAES y el proyecto, para su validación. Por ahora nos encontramos en la búsqueda de financiamiento para la ejecución de la obra pública y concluir la espera por un espacio público resiliente.
Cabe señalar que este proceso sirvió como referente metodológico para el rescate de espacio públicos con el que la ciudad de Colima asesoró a la cuidada de Galati, Rumania en el marco del Programa Cooperación Urbana Internacional promovido por la Unión Europea.
